La Oficina de Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea (ECHO) ha asignado hoy en concepto de ayuda humanitaria otros 18 millones de euros adicionales a las víctimas del conflicto en Sudán occidental. 10 millones de euros se dedicarán a hacer frente a las necesidades de las poblaciones desplazadas y de otros civiles de la región del Gran Darfur afectada por el conflicto y otros 8 millones de euros se dedicarán a las necesidades de los refugiados de Darfur que han huido al vecino Chad. La comunidad internacional ha reconocido la necesidad de prestar un apoyo generoso e inmediato a la ayuda humanitaria destinada a esta crisis. Por tanto, la Comisión está movilizando dichos fondos adicionales de ayuda humanitaria en respuesta a las necesidades rápidamente crecientes. Más de dos millones de personas (un tercio del total de la población de la región) se han visto gravemente afectadas por el conflicto armado en Darfur. Se calcula que han huido a Chad hasta 200.000 refugiados sudaneses y, aunque la mayoría ya están alojados en campamentos, aún siguen esperando en la frontera decenas de miles. Actualmente, la crisis de Darfur está reconocida como la crisis humanitaria más grave del mundo, pero la ayuda humanitaria no tiene garantizado un acceso sin trabas a todas las personas que la necesitan en Darfur.
El Comisario de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Poul Nielson, declaró lo siguiente: "Considero que es especialmente desalentador que, ante la crisis humanitaria desesperada ante la que nos hallamos actualmente en Darfur, los trabajadores humanitarios sigan topándose con trabas burocráticas innecesarias y las partes en conflicto sigan atacando los suministros de la ayuda. Estos incidentes son inaceptables y tienen que cesar inmediatamente. Ya es hora de que el Gobierno de Sudán y las demás partes empiecen a cumplir sus compromisos, pues la paciencia de la comunidad internacional se está agotando. "
Estas últimas decisiones se han tomado como respuesta a las recientes peticiones de las Naciones Unidas, y se recurrirá al CICR y otros organismos de ayuda humanitarios para proporcionar ayuda de urgencia integrada a las poblaciones afectadas, entre otros aspectos, para:
actividades de protección: ECHO continuará financiando medidas para mejorar el cumplimiento del Derecho humanitario internacional (incluida la concienciación de las partes en conflicto) y la atención a las víctimas de la violencia sexual y de hechos traumatizantes;
protección: suministro de hojas de plástico o materiales de construcción locales, o ambos;
productos no alimenticios: ropa, mantas, jabón, utensilios y combustible de cocina, contenedores de agua, colchonetas y mosquiteras;
ayuda alimentaria y seguridad de abastecimiento: ayuda dirigida a la mecánica de distribución general de alimentos, suministro de semillas y herramientas a los agricultores capaces de cultivar e intervenciones dirigidas en materia de sanidad animal;
agua: reparación de las fuentes de agua existentes, creación en los campamentos de condiciones de salubridad e higiene y transporte de agua en tanques, cuando sea necesario;
atención sanitaria: alimentación terapéutica y complementaria, prevención de enfermedades y atención de urgencia a las víctimas de la violencia (incluida con equipos médicos móviles).
ECHO inició su respuesta intensificada a la crisis actual ya en otoño del año pasado con dos decisiones por un importe de 4 millones de euros para las víctimas de la crisis de Sudán occidental y del otro lado de la frontera, en Chad. Al escalar la crisis a comienzos de 2004, ECHO decidió incrementar masivamente su respuesta añadiendo 14 millones de euros (10 millones para Darfur y 4 para Chad). Con la asignación de estos 18 millones de euros complementarios, la respuesta total de ECHO a la crisis se eleva a 36 millones de euros. Estos importes se añaden al programa normal de ECHO en 2004 para Sudán, por un valor de 20 millones de euros.
La Comisión también ha asignado 12 millones de euros, de los 250 millones que los Fondos Europeos de Desarrollo habían destinado a la Facilidad de Paz en África, para apoyar la misión de observación de la Unión Africana en Darfur durante 12 meses (aproximadamente el 55% de los costes). La misión de observación contará con hasta 120 observadores y una fuerza de protección de 270 militares.
La Comisión también ha proporcionado ayuda alimentaría y apoyo económico para negociaciones de alto al fuego. La ayuda total de la Comisión a las víctimas del conflicto de Darfur excede por el momento los 88 millones de euros.