«Ha aumentado el número de jóvenes europeos que estudian idiomas, y lo hacen mucho antes que sus padres», ha manifestado el Comisario Leonard Orban, responsable de multilingüismo, y ha añadido: «Después de tres años, las políticas nacionales en el ámbito de las lenguas son más coherentes: Existe un consenso general en determinadas cuestiones básicas, por ejemplo la importancia de las lenguas como competencia clave en el marco de la formación permanente, o la necesidad de que los estudiantes aprendan dos idiomas en su educación inicial. En algunos ámbitos son necesarias medidas complementarias: extender la enseñanza de lenguas a todas las vías educativas, aumentar la variedad de lenguas enseñadas y promover escuelas propicias a la enseñanza de lenguas».
En 2002, el Consejo Europeo de Barcelona hizo un llamamiento a fin de que se actuara «para mejorar el dominio de las competencias básicas, en particular mediante la enseñanza de al menos dos lenguas extranjeras desde una edad muy temprana». La primera respuesta de la Comisión fue el Plan de Acción (2004-2006) «Promover el aprendizaje de idiomas y la diversidad lingüística», en el que se establecen tres áreas de intervención estratégicas: promover el aprendizaje permanente de idiomas, aumentar la calidad de su enseñanza y crear un entorno más favorable a las lenguas. El Informe adoptado se centra tanto las actividades de la Comisión como en las de los Estados miembros. Sigue habiendo un gran reto: que aquéllos que ya no se hallan dentro del sistema de educación inicial —por lo general, adultos— siguen necesitando mejorar sus competencias lingüísticas. Al mismo tiempo, el número de profesores de idiomas es insuficiente, y también hay carencias en lo que respecta a su movilidad.
El Informe recoge numerosos ejemplos de buenas prácticas. En él se citan algunos países —por ejemplo, Alemania, Bélgica, Eslovenia, España, Estonia, Francia, Lituania, la República Checa y Rumanía— que han introducido el bilingüismo en su sistema educativo, incluso la enseñanza de una materia en otro idioma. Alemania, Austria, Eslovenia, Eslovaquia, Finlandia, Francia, Grecia, Italia, Noruega y Suecia fomentan el aprendizaje de la lengua de sus países vecinos, y en ocasiones organizan clases bilingües. Para fomentar el aprendizaje de idiomas entre los adultos, algunos países —como Bélgica y la República Checa— han introducido sistemas de «vales», cofinanciados por el Estado, los empresarios y los usuarios. En Estonia, Polonia y otros países de Europa Oriental, se ha creado un sistema de reciclaje de profesores, en particular a profesores de ruso, con objeto de que puedan enseñar inglés. En Rumania, se ha creado una enseñanza de posgrado a distancia en inglés y francés dirigida a profesores que viven en zonas rurales.
El informe puede consultarse en:
http://ec.europa.eu/dgs/education_culture/publ/pdf/lingua/br2007_es.pdf