Nueve de cada diez países en vías de desarrollo necesitan urgentemente de apoyo práctico para luchar contra la corrupción, destaca el nuevo índice
El Índice de Percepciones de Corrupción 2003 de Transparency International registra niveles de corrupción en 133 países. Siete de cada diez países obtuvieron un resultado menor de 5 sobre un puntaje limpio de 10, en tanto que cinco de cada diez países en vías de desarrollo obtuvieron un puntaje menor de 3 sobre 10.
“Los países ricos deben proporcionar apoyo práctico a los gobiernos de países en vías de desarrollo que demuestren la voluntad política para luchar contra la corrupción. Aquellos países con un alto nivel de corrupción no deberían ser penalizados, puesto que necesitan urgentemente de apoyo,” manifestó Peter Eigen, Presidente de Transparency International (TI), durante el lanzamiento del Índice de Percepciones de Corrupción 2003 (IPC) de TI que tuvo lugar hoy.
“El nuevo IPC señala altos niveles de corrupción en varios países ricos así como en otros más pobres, haciendo imperativo que los países desarrollados hagan respetar las convenciones internacionales para combatir el soborno por parte de las compañías internacionales, y que las empresas privadas cumplan sus obligaciones ante la Convención Antisoborno de la OCDE, a saber cesar el soborno de funcionarios públicos alrededor del mundo,” afirmó Eigen. Pero, continuó diciendo, “nueve de cada diez países en vías de desarrollo obtuvieron puntajes menores de 5 sobre un puntaje limpio de 10 en el IPC 2003 de TI. Sus gobiernos deben implementar estrategias orientadas a obtener resultados para luchar contra la corrupción, pero también necesitan urgentemente de ayuda práctica hecha a la medida de las necesidades de sus estrategias nacionales para luchar contra la corrupción.”
Para que estas estrategias tengan éxito, dijo Eigen, “el apoyo debe ir de la mano de un respaldo internacional para que la sociedad civil pueda monitorear la implementación de estas estrategias”. Además, insistió, “los países donantes y las instituciones financieras internacionales deberían asumir una línea más firme, cortando el apoyo financiero a los gobiernos corruptos y poniendo en la lista negra a las compañías internacionales que hayan sido descubiertas pagando sobornos en el extranjero.”
“Siete de cada diez países obtuvieron un resultado menor de 5 sobre un puntaje limpio de 10 en el IPC 2003 de TI, el cual refleja niveles percibidos de corrupción entre políticos y funcionarios en 133 países,” explicó Eigen. “Cinco de cada 10 países en vías de desarrollo obtuvieron menos de 3 puntos sobre 10, señalando un alto nivel de corrupción.” El IPC anual publicado hoy por TI, la organización no gubernamental internacional líder en la lucha contra la corrupción a nivel mundial, refleja las percepciones de empresarios, académicos y analistas de riesgo, tanto residentes como no residentes. El trabajo estadístico fue coordinado por el Profesor Dr. Johann Graf Lambsdorff de la Universidad de Passau en Alemania, con la asesoría de un grupo de especialistas internacionales.
La corrupción se percibe como un factor dominante en Bangladesh, Nigeria, Haití, Paraguay, Myanmar, Camerún, Angola, Tayikistán, Kenia, Georgia, Azerbaiyán e Indonesia, países con menos de 2 puntos en el nuevo índice. Los países con una puntuación superior a 9, con niveles muy bajos de corrupción percibida, son países ricos, a saber Finlandia, Islandia, Dinamarca, Nueva Zelanda, Singapur y Suecia.
Peter Eigen identificó algunos de los cambios destacados por el IPC. “A partir de la base de datos de fuentes que han sido utilizadas de manera consistente para el índice, se pueden observar mejoras para Alemania, Austria, Bélgica, Colombia, Francia, Irlanda, Malasia, Noruega, y Tunicia. Ejemplos notables de empeoramiento son Argentina, Bielorrusia, Chile, Canadá, Estados Unidos, Israel, Luxemburgo, Polonia, y Zimbabwe.”
“En varios países se puede ver hoy un compromiso político de alto nivel para luchar contra la corrupción,” afirmó Rosa Inés Ospina Robledo, Vicepresidente de TI hablando hoy desde Bogotá, Colombia. “En estos países el apoyo internacional, especialmente para la transparencia en la contratación pública, es fundamental para construir bases sólidas para eliminar la corrupción en el gobierno y el servicio público. El sector privado en particular debe responsabilizarse de su conducta dentro y fuera de su país y debe tomar medidas urgentes para eliminar el soborno. Para que esto se haga realidad, TI y algunas compañías del sector privado han trabajado conjuntamente para desarrollar una serie de Principios Empresariales para Contrarrestar el Soborno, promoviendo entrenamientos antisoborno y códigos de conducta dentro de las compañías. TI también ha implementado Pactos de Integridad contra el soborno en contrataciones públicas.”
“Podemos comenzar a cerrar la ruptura entre países ricos y en vías de desarrollo, la cual fue tan evidente durante la reunión de la OMC en Cancún, México, el mes pasado,” dijo Peter Eigen, “si las negociaciones de la OMC se lanzan sobre un acuerdo de marco multilateral sobre Transparencia en las Adquisiciones Gubernamentales (TAG). En cuanto a los países menos desarrollados, por su propio interés deben introducir medidas de transparencia para las adquisiciones públicas puesto que está en juego el desperdicio de sus escasos recursos. Si no se controla la corrupción en las adquisiciones, crecerá la pobreza.”
“El nuevo IPC demuestra que la corrupción no está presente únicamente en países pobres,” dijo hoy en Londres Laurence Cockcroft, Presidente de TI (Reino Unido). “Hay niveles de corrupción preocupantemente altos en países europeos como Grecia e Italia, y en países potencialmente ricos en petróleo como Nigeria, Angola, Azerbaiyán, Indonesia, Kazajstán, Libia, Venezuela e Irak.”
“Para dar un vuelco a esta situación de tal manera que las personas del común participen de la riqueza petrolera de su país, TI está luchando, junto con otras ONGs, para que las compañías petroleras internacionales publiquen lo que pagan a los gobiernos y a las compañías petroleras del estado. Así los ciudadanos y las organizaciones de la sociedad civil en países como Nigeria, Angola, Irak y Kazajstán tendrán una idea más clara de los ingresos del estado,” dijo Cockcroft, miembro de la Junta Directiva internacional de TI, “de tal forma que puedan pedir cuentas a sus gobiernos cuando el presupuesto nacional no se use para mejorar los escasos recursos públicos, sino desaparezca en costosos proyectos de vanidad o en las cuentas secretas en el exterior de políticos y funcionarios del estado.”
“Los partidos políticos, las cortes y la policía fueron identificados como las tres áreas más necesitadas de reformas por el Barómetro de Corrupción Mundial de TI, una encuesta al público general en 48 países, lanzada en julio del 2003,” dijo Cockcroft. “Esto indica una grave falta de confianza en la autoridad a nivel mundial.”
El IPC 2003 publicado hoy, es una encuesta de encuestas que refleja las percepciones de empresarios, académicos y analistas de riesgo, tanto residentes como no residentes. Lanzado por primera vez en 1995, el IPC de este año está basado en 17 encuestas de 13 instituciones independientes. Basado en la información proporcionada por las encuestas realizadas en diferentes momentos entre el 2001 y el 2003, el IPC incluye solamente aquellos países incluidos en al menos tres encuestas. “Es importante recalcar que el IPC, aun con 133 países, es tan sólo una visión general,” explicó Peter Eigen. “No hay suficientes datos sobre otros países, muchos de los cuales probablemente son muy corruptos.”
El IPC 2003 es un complemento del Índice de Fuentes de Soborno (IFS) de TI, el cual muestra la propensión de las compañías de países exportadores líderes a sobornar en economías de mercado emergentes. El IFS 2002, publicado el 14 de mayo del 2002, reveló altos niveles de soborno por parte de firmas de Rusia, China, Taiwán y Corea del Sur, seguidas de cerca por Italia, Hong Kong, Malasia, Japón, Estados Unidos y Francia – a pesar de que muchos de estos países firmaron la Convención Antisoborno de la OCDE, la cual declara ilegal el soborno de funcionarios públicos extranjeros.
“La Convención de la OCDE entró en vigor en 1999, sin embargo seguimos a la espera de los primeros juicios en los tribunales de los 35 países signatarios,” manifestó Eigen. “Los gobiernos de estos países tienen una obligación con los países en vías de desarrollo de investigar y enjuiciar a las compañías dentro de sus jurisdicciones que estén acudiendo al soborno. Sus sobornos e incentivos para corromper funcionarios públicos y políticos están debilitando las posibilidades de un desarrollo sostenible en los países más pobres.”
Para los detalles completos del IPC 2003 de TI, visite http://www.transparency.org/cpi/index.html#cpi