Eurodiputados, organizaciones de consumidores y representantes de la industria informática de ambas orillas del Atlántico se reunieron el pasado lunes 21 de enero en una audiencia pública organizada por la comisión de Libertades Civiles del Parlamento Europeo tras el anuncio de compra de DoubleClick por parte de Google, una operación que genera reticencias por su posible impacto sobre el derecho a la privacidad de los usuarios.
Fusión de gigantes
Internet es un medio cada vez más atractivo para los anunciantes; la publicidad online mueve 27.000 millones de dólares anuales, y se espera que esta cifra llegue a duplicarse en los próximos cuatro años. Las compañías luchan por mejorar su posición en el mercado y, en este contexto, Google anunció en la primavera de 2007 su intención de comprar DoubleClick, una empresa que ofrece servicios de publicidad y de seguimiento estadístico de las promociones en la red.
Aunque Estados Unidos dio el visto bueno a la operación, la Comisión Europea abrió una investigación para determinar si existe riesgo de abuso de posición dominante.
Servicios gratuitos
Muchos de los servicios que se ofrecen en la red son gratuitos, a cambio de lo cual el usuario recibe publicidad de algún tipo (banners, pop-ups, newsletters...) y acepta que se realice un seguimiento de su navegación mediante las llamadas "cookies", pequeños programas que se instalan en el ordenador y graban información referente a los hábitos del internauta: qué páginas visita, qué palabras busca, qué idioma utiliza...
Cornelia Kutterer, de la Organización de Consumidores Europeos, consideró durante la reunión organizada en el Parlamento Europeo que, a pesar de que estos servicios sean gratuitos en términos económicos, no dejan de tener un coste para el usuario: la pérdida de privacidad y de control sobre sus datos personales. "Los usuarios suelen pensar que internet es más privado de lo que es en realidad", afirmó.
Es habitual que las compañías conserven los datos facilitados por el usuario durante un período de tiempo variable, que en el caso de Google es de dieciocho meses, como explicó el representante de la compañía Peter Fleisher.
Facebook
De hecho, episodios como el ocurrido en noviembre de 2007 en Reino Unido, cuando se extraviaron en el correo datos confidenciales de 25 millones de personas, hacen que cada vez sea mayor la preocupación ante una posible usurpación de identidad en la red. La eurodiputada liberal holandesa Sophia In't Veld recordó asimismo la reclamación interpuesta por varios usuarios de la red Facebook referente al uso que realizaba la empresa con sus datos personales. "El consumidor debe poder ejercer su derecho a decidir", declaró.
En el caso concreto de la fusión entre Google y DoubleClick, algunos eurodiputados manifestaron abiertamente su "preocupación", como el portugués del Partido Popular Europeo Carlos Coelho, mientras que otros, como la propia In't Veld, dijeron que un mayor nivel de competencia en el mercado "resultaría en un mayor nivel de privacidad para los usuarios".
Leyes internacionales
Actualmente, las leyes comunitarias restringen la utilización de los datos personales recogidos en la red. Además, en la Unión Europea cualquier ciudadano que considere que se ha vulnerado este derecho puede acudir a los tribunales; sin embargo, los participantes en el debate celebrado en la Eurocámara recordaron que internet es un medio global, por lo que muchos opinaron que las leyes que regulen su funcionamiento deberían ser, asimismo, internacionales. Entre ellos, el director de la Agencia española de Protección de Datos, Artemi Rallo, quien remarcó la necesidad de "establecer estándares internacionales para garantizar la privacidad en la red".
Más información :
- Guía: protección de datos en la Unión Europea
- Directiva europea relativa al tratamiento de los datos personales
- Programa del seminario
- Artículo: "Una guerra diferente": el Secretario de Seguridad Nacional estadounidense en el PE
- Nota de prensa (en inglés)