Los daños provocados por la sequía y la invasión de langostas de 2004 han provocado una crisis alimentaria, alerta la FAO
10 de mayo de 2005, Roma -- Las consecuencias de la sequía y la plaga de langosta del desierto del pasado año han agravado la situación alimentaria en diversas regiones de Burkina Fasso, Chad, Malí, Mauritania, Níger y el norte de Senegal, según la alerta lanzada hoy por la FAO.
Al mismo tiempo, los precios del mijo continúan subiendo, mientras que los del ganado se han desplomado. Las condiciones para la producción ganadera se han deteriorado debido a la escasez de pastos y recursos hídricos. El desplazamiento de los rebaños en busca de agua y alimento han provocado ya conflictos entre las poblaciones afectadas, según esta organización de la ONU.
Grave malnutrición infantil
El acceso a los alimentos básicos se ha hecho cada vez más difícil para los grupos vulnerables, en especial las familias que viven del pastoreo. Los casos de malnutrición grave entre la población infantil se incrementan rápidamente. Según informes procedentes de la región de Kidal (Malí), un tercio de los niños menores de tres años se encuentran afectados.
En Níger, cerca de 2,5 millones de personas y unas 3 000 aldeas se enfrentan a escasez de alimentos. El gobierno ha organizado la venta de cereales con precios subvencionados a las poblaciones afectadas, en una medida que ha tenido escaso impacto dentro del marco de crisis generalizada. UNICEF ha lanzado un llamamiento para conseguir fondos y poder alimentar a 750 000 niños en este país africano, de los cuales unos 150 000 presentan graves signos de malnutrición.
En Burkina Faso, las autoridades han distribuido cereales a las comunidades en peor situación, una medida que se espera tome pronto Chad. El gobierno de Malí ha subvencionado la venta de 15 000 toneladas de piensos para el ganado.
En Mauritania, donde los casos de malnutrición se extienden por doquier, el Programa Mundial de Alimentos ha lanzado su programa de "comida por trabajo", mientras que la Unión Europea tiene previsto iniciar una campaña de distribución de alimentos.
Llamamiento para conseguir ayuda
La llegada del próximo período de escasez - entre dos cosechas - requerirá el envío de ayuda alimentaria suplementaria, así como la distribución de piensos subvencionados, el establecimiento de corredores para el paso del ganado y programas de sanidad animal. Muchas familias de campesinos necesitarán también semillas y otros activos agrícolas para la próxima temporada de siembra, que iniciará a finales de mayo o en junio.
La FAO ha solicitado un total de 11,4 millones de dólares EE.UU. para asistir a los agricultores y ganaderos en los países afectados. Hasta ahora, Italia, Noruega y Estados Unidos han concedido 2,1 millones de dólares EE.UU. destinados a la distribución de semillas y piensos y servicios veterinarios. Sin embargo, hacen falta más fondos para hacer frente a una situación que no cesa de empeorar.
Contacto:
Erwin Northoff
Coordinador de prensa, FAO
erwin.northoff@fao.org
(+39) 06 570 53105
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FAO/23786/R. Lemoyne
Un niño transporta una cría de cabra en Níger
Enlaces
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Último informe sobre situación alimentaria en el Sahel
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Informe de la FAO sobre Africa (disponible en inglés)
FAO/1888/R. Carucci
El desplazamiento del ganado en busca de agua ya ha provocado conflictos.